Mientras que las PYMEs en España tardan en, en detectar y solucionar un problema empresarial importante, un promedio de 37 días (adecco 2020), las empresas alemanas tardan en promedio 26 días (KPMG 2021) y las empresas en los Estados Unidos, alrededor de 17 días (McKinsey 2020). La diferencia en los tiempos promedio entre España y los Estados Unidos es de veinte días. ¡Veinte! Sorprendente, ¿no?.

¿Qué hace que las empresas en los Estados Unidos sean tan rápidas en resolver problemas importantes en comparación con otras partes del mundo?

¿Es la cultura empresarial el factor clave en la eficacia empresarial y en la capacidad para resolver problemas con rapidez? ¿Nos falta innovación? ¿Analizamos superficialmente y nos cuesta decidir más de lo normal? ¿No sabemos trabajar en equipo? ¿Hacemos un uso mediocre de la tecnología? ¿Pecamos de falta de orientación al resultado?

¿Qué podemos aprender de sus métodos y aplicarlos en nuestro  negocio para mejorar  y mantener la competitividad en un mundo cada vez más loco?

Jon, el director general, estaba preocupado por la disminución del margen de la empresa. Sabía que algo tenía que cambiar, pero no estaba seguro de qué. Decidió hablar con Marta, la directora comercial, para ver si podían compartir alguna buena idea.

Marta entró en la habitación y se dejó caer en la silla frente a su escritorio. «¿Qué pasa, Jon?», preguntó con una voz cansada.

Jon le entregó un informe de resultados y le dijo: «Nuestro margen  ha caído en un 7 por ciento en solo un trimestre. Estábamos en el 25% y ya íbamos justos. Necesitamos hacer algo».

Marta tomó el informe y lo examinó detenidamente. «Vaya», dijo con una expresión de preocupación. «No sabía que las cosas estaban tan mal».

Jon asintió con la cabeza. «Sí, lo sé», dijo. «Pero necesitamos encontrar una solución. ¿Qué ideas tienes?»

Marta reflexionó por un momento. «Podemos intentar reducir nuestros gastos en publicidad y marketing. También buscar formas de reducir nuestro gasto de transporte», dijo. «Pero deberíamos empezar a pensar seriamente en diversificar nuestra venta a clientes no tan grandes. Dependemos mucho del canal de grandes superficies y nos tiene pillados».

Jon asintió con la cabeza. «Sí, eso es una buena idea», dijo. También «Necesitamos buscar nuevas oportunidades de venta para mejorar el margen medio por mix de productos y clientes. ¿Cómo podríamos hacerlo?»

Marta se puso a pensar en ello. «Podríamos intentar buscar socios comerciales en otros sectores para expandir nuestra presencia en el mercado», sugirió. «También podemos enfocarnos de una vez por tiodas en la venta ONLINE y en nuestras redes sociales para atraer a una base de clientes más amplia. Es un proyecto alq ue seimpre hemos entrado de puntillas y ya no podemos permitirnos el lujo de no atender directamente a los clientes».

Jon consideró las ideas de Marta. «Sí, tiens razón», dijo. «Tendremos problemas con nuestros distribuidores de toda la vida pero necesitamos seguir pensando en algo grande. ¿En cuánto tiempo crees que podríamos tener un plan de mejora y quién del equipo debe participar?»

Marta reflexionó un poco más. «Podemos comenzar en dos meses y el equipo de marketing y ventas debería estar involucrado», sugirió.

Jon asintió con la cabeza. «Ni de coña. Te doy mes y medio», dijo.  «El Consejo no lo aceptará.  Necesito ver un plan por escrito esta tarde. Y asegurémonos de que estas mejoras sean realistas y prácticas. No quiero prometer algo que no podamos cumplir».

Marta miró su agenda y respondió: «Lo siento, Jon, pero para esta tarde no habré tenido tiempo de hablar con el equipo. Pero podríamos quedar mañana temprano para hacerlo y así poder presentarte un plan más completo y detallado».

Jon asintió. «De acuerdo, eso suena bien», dijo. «Hablaremos mañana temprano y revisaremos el plan juntos. Gracias, Marta».

Marta sonrió y se levantó de la silla. «Perfecto, nos vemos mañana», dijo mientras salía de la oficina.

 

Hoy, cuando tengas diez minutos, ponte el gorro de pensar y pregúntate cuántos días tardas en tu pyme en identificar y resolver un problema importante. 

Yo, reconozco que aún, demasiados. Tic, tac, tic, tac, tic, tac.